Chamaerops humilis

El nombre de su género Chamaerops, proviene del griego chamai, que significa pequeño, y rhops, arbustivo, por su pequeño porte. El nombre de la especie Humilis, procede del latín humilis-e, de poco crecimiento.

Es una palmera nativa del área Mediterránea. Puede considerarse como uno de los elementos más representativos de la vegetación mediterránea del suroeste de Europa. Es la única palmera que crece de forma espontánea en Europa.

Es una palmera dioica, que presentan los órganos reproductores masculinos y femeninos en ejemplares distintos e incluso a veces hermafrodita.

En su hábitat natural suele tener varios troncos de porte achaparrado creciendo de 1 a 2 metros, aunque se pueden encontrar ejemplares de un solo tronco que pueden crecer hasta 3 ó 4 metros de. El tronco suele tener mayor anchura en su parte superior y es característico su recubrimiento fibroso de la base de las hojas viejas.

Las hojas son palmeadas circulares de 50 a 80 centímetros de color verde o verde azulado. El pecíolo es muy espinoso  con espinas rectas de color amarillento de 2 a 3 centímetros. Las inflorescencias de 15 a 20 centímetros de longitud, crecen entre las hojas. Su fruto es redondeado de color amarillo-rojizo, ligeramente carnoso.

Se multiplica por semillas. Es la única palmera que crece de forma espontánea en Europa.

La yema apical, “corazón” o «cogollo» de esta especie es tierno y comestible.

Sus frutos, llamados vulgarmente dátiles de zorra o palmiches, se emplearon en medicina popular como astringente, y sus hojas, para la fabricación de escobas, cestas y esteras.

Esta especie soporta todo tipo de suelos. Es resistente a la sequía y a los vientos marinos. Tolera la exposición a pleno sol  y la media sombra. Resisten temperaturas de hasta 10 grados bajo cero.

Es una especie muy abundante como planta arbustiva en Cádiz, se identifican ejemplares en el Parque Genovés, Plaza de España, Parque de los Cinco Continentes, Plaza de Santa Ana, Paseo del Vendaval.